El combustible está compuesto por elementos corrosivos, que al quedarse pegados en las superficies internas del depósito de combustible causan la corrosión que oxida el material.
Esta oxidación puede provocarse por tener la moto mucho tiempo parada, por los aditivos del combustible o incluso por el mismo calentamiento de la gasolina que a su vez puede generar partículas de óxido que acaben dañando las paredes internas del tanque de gasolina.
Una vez nos encontramos con este problema tenemos dos opciones, optar por comprar un tanque nuevo y sustituirlo o tratar de limpiar y reparar el antiguo. La primera de estas elecciones será adecuada cuando el depósito se encuentre en muy mal estado y no se pueda recuperar. Sin embargo, en muchas ocasiones sí que se puede reparar el tanque original y de ese modo se evita un mayor desembolso de dinero, así como las dificultades que algunos modelos clásicos presentan cuando se trata de conseguir piezas de recambio.
En Motostion, reparamos los depósitos de gasolina y eliminamos todo el óxido que puedan presentar. Para realizar esta labor, se abre el tanque de combustible por la parte inferior y se limpia internamente con chorro de arena. La limpieza en seco con chorro de arena es un método que consiste en impulsar la arena sobre la superficie a través de un chorro a presión a alta energía. Es capaz no solo de limpiar sino también de lijar dicha superficie. La arena es un material abrasivo de enorme eficacia. Posteriormente se vuelve a cerrar el depósito con soldadura de manera que no se aprecia una vez montado de nuevo en la moto. Esta reparación cuenta con un año de garantía y siempre es recomendable revisar el estado de la bomba de gasolina ya que ésta, puede presentar óxido también provocando que en un futuro pueda adherirse de nuevo al tanque.
En Motostion, también reparamos los depósitos con abolladuras o desperfectos de pintura. La reparación y pintura del tanque gasolina de golpes y rozaduras se realiza abriendo el depósito por la parte inferior para sacar el abollón, para posteriormente soldar y pintarlo para que quede como nuevo. Es posible que, si es poco el golpe que tenga, no sea necesario abrirlo.
El precio de la eliminación del óxido está desde 150€ hasta 280€ dependiendo de la técnica que se utilice (limpieza con ácido o chorro de arena), el tamaño del depósito y la forma del depósito.
Para cualquiera de estas reparaciones se necesita tener el depósito para poder dar un presupuesto acorde al trabajo a realizar.